Mónica y Sandra son las responsables de esta marca de bolsos y accesorios hechos a mano, responsable con el medio ambiente al utilizar tejidos recuperados y producidos en su tienda-taller de Guardo. Son artículos hechos de manera completamente artesanal (diseño, patronaje y producción). Sus conceptos básicos son el «handmade» y el «upcycling».
Además del reciclaje de vaqueros, para la confección de estos artículos utilizan materias primas muy seleccionadas que abarcan desde batiks de algodón traídos desde Camboya, telas antiguas provenientes de míticos almacenes ya desaparecidos, hasta telas de diseños propios, pasando por proveedores nacionales para el resto de materias primas. Usar tejidos recuperados y finales de stock hace que la producción sea limitada, intentando siempre que todos los modelos de nuestras mochilas sean únicos, que no haya dos iguales.
Otra de sus actividades es la formación, impartiendo talleres relacionados directamente con el mundo del diseño y la confección.